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            3.2. Cordillera Subandina  
            Después del levantamiento de la Cordillera Oriental  se inicia el levantamiento de la Cordillera Subandina,  la que se diferencia por su material predominantemente sedimentario, joven y en  forma de pliegues. 
            La formación de esta cordillera comienza en la era  Mesozoica (80 - 260 m.a.),  durante una intensa actividad tectónica, que origina constantes cambios en los  ambientes de sedimentación. 
            Bajo estas condiciones se depositan las primeras  secuencias sedimentarias de naturaleza calcárea en un ambiente  marino, correspondiente al Grupo Pucará del Triásico (245 m.a.). 
            Posteriormente, entre 200 y 40 m.a., ocurrieron transgresiones  (retiros del mar) y regresiones (ingreso de aguas marinas), originando en unas  épocas, sedimentación continental como las formaciones Sarayaquillo, Yahuarango,  Chambira, Vivian y otras; y sedimentación de origen marino como las formaciones  Cushabatay, Esperanza, Aguas Calientes, Chonta, entre otras.  
              
              Vista de la Cordillera Subandina  
            Paralelamente a estas sedimentaciones afloran cuerpos  subvolcánicos de composición cuarcífera, cuyos materiales se aprecian en los sectores  del río Huaynabe y la localidad de Santa Cruz. 
            Desde fines del Terciario (8 m.a.) hasta la actualidad,  los cambios bioclimáticos se acentúan y los procesos geodinámicos se acrecientan  originando la sedimentación fluvioaluvial y aluvional de las formaciones El  Valle y Tocache, las que se aprecian en las terrazas de ambas márgenes del río  Huallaga. 
            Morfológicamente están representados por sistemas de  colinas, montañas altas y bajas de origen estructural (plegadas y falladas) y denudacional.  Asimismo, en este sector se han localizado los valles de sedimentación fluvioaluvial  (terrazas bajas), planicies fluvioaluviales (terrazas medias y altas), relieves  que se encuentran adyacentes al río Huallaga y las partes bajas del  Challhuayacu, Chontayacu, Mishollo y Tocache. 
            Los tipos climáticos varían desde el muy húmedo y  semicálido, en las áreas altas de la cordillera, hasta húmedo y cálido, en las  planicies de los valles ubicados, principalmente, entre los ríos Uchiza y  Cachiyacu de Lupuna. En este sector, también existe excedente de humedad. 
            En la   Faja Subandina nacen los principales afluentes de la margen  derecha de este sector del río Huallaga, siendo los principales ríos: 
            Uchiza, Huaynabe, Cachiyacu de Santa Ana, Cachiyacu de  Lupuna, Pólvora y Pulcachi. Estos cuerpos de agua presentan alto contenido de sales  en solución. 
                          Al igual que en la Cordillera Oriental,  la cobertura vegetal natural, se ubica, variando desde bosques con árboles  altos en las partes bajas de clima muy húmedo a semicálido, hasta bosques de  árboles medianos a achaparrados de clima muy húmedo a templado cálido, adicionalmente  a estas formaciones vegetales, se presenta una muy particular de la zona con árboles  medianos, asociados con matorrales de fisonomía escleromórfica en las laderas  próximas al río Seco del sector de Santa Cruz y otra formación de bosque  pantanoso que está regulado por las fluctuaciones estacionales del flujo creciente  y vaciante, de tipo mixto sucesional del complejo de orillares representados  por Picus trigona (renacos), Calycophyllum  spruceanum (capirona), Hura crepitans (catahua), Cecropia sp. (cetico), Erytrina  poeppgiana (amasisa), Bombax munguba (punga)  y Gynerium sagitattum (cañabrava). 
            Las partes planas del valle del Huallaga, las colinas y  las laderas de montañas se encuentran fuertemente intervenidas por diferentes actividades  antrópicas realizadas en ellas. 
            Por su fisonomía y limitaciones de desarrollo en los  árboles, el potencial forestal maderero es de regular a pobre (menos de 90 m 3 /ha), siendo la especie más valiosa y  actualmente muy extraída la Cedrelasp.(el cedro). 
            En este sector viven especies de fauna silvestre de la  región biogeográfica neotropical denominada del dominio amazónico o selva baja (Brack  1986), destacando poblaciones aisladas de Saguinus  fuscicollis (pichicos), Hydrochoerus hydrochaeris (ronsocos),  garzas varias, anfibios (ranas, sapos) y reptiles (tortugas, serpientes). En  términos de fauna ictiológica, se reportan 71 especies de peces. 
              
              
              
              
              
              
              
              
              
              
            
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