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PRESENTACIÓN

El Proyecto Suelos Tropicales, tiene como fin el estudio, para el uso racional del suelo y de los recursos naturales de la Amazonía Peruana, presenta este informe, como una contribución al desarrollo del agro de dicha región.

En este documento se expone de una manera didáctica y sencilla, la técnica para la producción y el manejo de plantas de Camu-camu, cuyo fruto tiene mucho arraigo y demanda en la Selva Peruana, y además un gran potencial industrial para el mercado interior y exterior por su sabor y valor nutritivo.

Los autores han desarrollado una metodología de propagación por injerto, producto de la observación y estudio del crecimiento y desarrollo de la planta hasta su traslado a campo definitivo, lo cual significará ahorro en tiempo, recursos económicos y un mejor manejo del cultivo.

Este logro constituye un ejemplo de cómo la investigación aplicada en forma pragmática genera alternativas tecnológicas que bien empleadas pueden contribuir a resolver gran parte de la problemática de la producción agrícola nacional.

La inversión económica realizada en este trabajo, inicialmente por el CIID-Canadá y posteriormente por el Proyecto Suelos Tropicales, se ha complementado magistralmente con el esfuerzo técnico del Instituto Nacional de Investigación Agraria-INIA, dando como resultado una nueva tecnología, que indudablemente otorgará mayores beneficios económicos y coadyuvará al logro de un mejor nivel de vida del campesino de nuestra amazonía.

1. INTRODUCCIÓN

El camu camu tiene una fruta que se caracteriza por su alto contenido de ácido ascórbico : 2,780 mg por 100 gr de pulpa (Calzda 1980, 1985). El sabor de la fruta, diferente a otras fuentes de ácido ascórbico, lo hace atractivo en los mercados de países desarrollados como EE.UU., Japón, Alemania, donde prefieren productos alimenticios naturales y con sabores nuevos. La industrialización del camu camu requiere abundante cantidad de materia prima en forma permanente, pero no existen áreas cultivadas para ese fin.

Tradicionalmente se conoce de la siembra del camu camu por semilla, desde el momento que se conoció su importancia económica, pero técnicamente es preferible más la propagación vegetativa por injerto. El desarrollo del método de injerto en camu camu fue un gran avance para la domesticación y cultivo tecnificado de este frutal en la amazonía. Esta técnica fue lograda en la Estación Experimental Pucallpa, como resultado de varios años de investigación (Enciso, 1992).

La forma correcta de propagar el camu camu es utilizando plantas injertadas, lo que permitirá uniformizar y elevar los rendimientos por planta, aprovechando los beneficios de algunos patrones resistentes a enfermedades y plagas y propagar variedades seleccionadas por su mayor rendimiento y contenido de ácido ascórbico. Asimismo, la injertación es importante porque permite acortar el período entre la siembra en el campo definitivo y el inicio de fructificación.

El presente documento resume los resultados de investigación sobre las técnicas de manejo en vivero requeridas para la producción de plantas injertadas de camu camu, que permitan el establecimiento de las nuevas áreas de plantaciones tecnificadas. Para ello se describen las técnicas para la conducción de las plantas en el vivero en las etapas de semillero, almaciguera e injertera y el trasplante al campo definitivo.

Siendo el injerto el método de propagación de mayor utilidad practica, es necesario conocer los distintos pasos a seguirse en este sistema. Las secuencias se pueden dividir en: 1) obtención de semillas; 2) almaciguera; 3) injertera; 4) extracción para trasplante.

2. OBTENCIÓN DE SEMILLAS PARA PORTAINJERTOS

Por el momento se viene empleando como portainjerto plantas de camu camu arbustivo (Myrciaria dubia) provenientes de semilla botánica, sobre las cuales se injertan las yemas de los clones mejorados. Se están efectuando experimentos para utilizar portainjertos de una especie arbórea de camu camu (Myrciaria sp), pero los resultados preliminares indican que esta especie tiene germinación y crecimiento inicial en el vivero más lento que el camu camu arbustivo, razón por la cual no se recomienda su uso como portainjerto. Para lograr plantas injertadas de camu camu se requiere primero formar el portainjertro. La formación del portainjerto se realiza empleando como material de propagación la semilla la cual debe sembrarse por lo menos 6 meses antes de la época planificada para injertar.

2.1. Cosecha y conservación de semillas

Los frutos deben ser cosechados maduros y con una coloración violeta. La cosecha de frutos maduros se realiza entre los meses de marzo y mayo en las zonas aluviales donde el camu camu crece en condiciones inundables; en zonas no inundables también se encuentra frutos en este período y en menor cantidad en el resto del año. Los frutos deben ser colectados de plantas preseleccionadas por su buen aspecto sanitario y vigor vegetativo; se deben colectar de plantas que produzcan más de 10 kg de fruta por planta.

Las semillas pueden ser separadas de fruto estrujándolas o partiendo el fruto con los dedos. La pulpa queda adherida, por lo que debe ser retirada lavando las semillas con abundante agua. Las semillas lavadas se ponen a orear en la sombra por una hora, hasta lograr que todo el agua escurra; luego se clasifican en grandes, medianas y pequeñas; se eliminan las semillas pequeñas y las picadas.

Las actividades de despulpado, lavado y selección de las semillas, deberán ser efectuadas el mismo día, debido a que éstas pierden su poder germinativo rápidamente, si no les coloca en condiciones de humedad apropiadas.

La siembra debe efectuarse lo más pronto posible, pero en caso de no poder hacerlo inmediatamente, existen tres formas de conservar las semillas hasta por 15 a 30 días, manteniendo un 80 % de poder germinativo. Estas formas son:

(1) Mantener las semillas dentro del fruto en ambiente natural o en refrigeración. Esta forma de conservación requiere mucho espacio por el volumen de fruta que se tiene que almacenar.

(2) Las semillas extraídas se pueden colocar dentro de bolsas plásticas en refrigeración a 5ºC (en la parte inferior de la refrigeradora). Esta forma de conservación requiere menos espacio que la anterior.

Remojar la semilla en recipientes con agua limpia. Cambiando de agua cada 3 días cuando presente indicios de fermentación.

2.2. Pregerminación de las semillas

Las semillas deben ser sembradas lo más pronto posible después de ser extraído del fruto. Antes de sembrarlas en el almácigo las semillas limpias y seleccionadas deberán ser colocadas en tratamientos de pregerminado que puede ser por el método de estratificación húmeda o por el método del embolsado.

En el método de pregerminado por estratificación húmeda, se utilizan recipientes de tamaño variable y capacidad de 5 a 10 litros. En el fondo del recipiente se coloca una capa de 5 cm de aserrín húmedo, preferible de madera roja, se nivela con un pedazo de madera. Después se esparce la semilla seleccionada sobre la capa de aserrín, de manera que todas ellas queden en contacto directo con el aserrín y separadas 1 cm de las paredes laterales del recipiente, se cubre con otros 3 cm de aserrín húmedo, se repite esta operación, hasta completar la capacidad del recipiente tal como se presenta en la Figura 1.

Después de la estratificación, los recipientes deben ser guardados bajo techo, en zonas bien ventiladas, donde no penetre lluvia y ubicados a una cierta altura para facilitar el riego. Debe tenerse especial cuidado que el aserrín en las camas de estratificación no esté ni seco, ni con exceso de agua, porque en estas condiciones la semilla pierde rápidamente su viabilidad.

El riego inicial requerirá alrededor de 4 litros de agua por cada recipiente de 8 a 10 litros. Cuando el clima es caluroso es necesario efectuar los riegos con intervalo de un día, empleándose 2 litros de agua por recipiente de 8 a 10 litros. En períodos lluviosos los riesgos se pueden espaciar a tres por semana, usando 2 litros por recipiente evitando el exceso de agua en el recipiente.

Las semillas inician la germinación a los 15 a 20 días después de la fecha de estratificación. Las semillas germinadas son retiradas de los recipientes de estratificación y colocadas en las camas de almácigo o simplemente se las mantiene en los mismos recipientes para que desarrollen hasta que las plántulas tengan 5 pares de hojas y una altura de 10 cm, para luego ser sembradas en las camas almacigueras.

Este método tiene la ventaja que las semillas después de germinadas puede permanecer en el sustrato hasta que las plántulas logren 10 pares de hojas y una altura de 10 cm y pueden ser trasplantados a las camas de almácigo formando lotes homogéneos.

El pregerminado de semillas por el método del embolsado, considera el uso de bolsas plásticas (Tanchiva, 1990). Las semillas previamente lavadas, oreadas y seleccionadas son colocadas dentro de bolsas de polietileno transparente. La germinación se inicia a los 20 días, lográndose altos porcentajes de germinación. Este método permite manipular mayores cantidades de semilla que el anterior, sin l necesidad de utilizar abundante sustrato, ni riegos adicionales. La desventaja de este método es que las semillas germinadas deben ser retirados hacia los almácigos antes que logren raíces de 3 cm de longitud, caso contrario tienden a etiolarse fácilmente.

3. MANEJO EN EL ALMACIGO

El tipo de cama de almácigo comúnmente utilizado para el camu camu es el de cama a desnivel (10 cm debajo del nivel). Este tipo de cama permite retener humedad después de cada lluvia o riego favoreciendo el desarrollo de las plantas las que logran 0.70 m de altura en sólo 6 meses (Figura 2). (Foto 1).

La utilización de camas almacigueras exige disponer de un terreno que debe reunir las siguientes condiciones:

Topografía ligeramente plana.
Completamente expuesto al sol.
Cerca de una fuente permanente de agua.
Cercado, para evitar el daño por animales.
Debe estar ubicado cerca del terreno donde se hará la injertera.
Que tenga camino para el transporte y el cuidado de las plántulas.

Elegido el lugar, se procederá a la limpieza de las malezas y de todo el material grosero. Terminada esta labor se hace el trazado de las camas, que deben estar alternadas con caminos que sirvan para el desplazamiento del personal para el manejo del almácigo. El ancho de las camas será de 1 metro y el largo variable, pudiendo ser 10 m; la profundidad de las camas será de 40 cm, quedando los caminos de 50 cm de ancho (Figura 2).

Cuando el número de las plantas por manejar sea bastante grande, se debe trazar un camino ancho en el vivero de forma que permita el acceso de vehículos para la atención y transporte.

En las camas de 10 m de largo previamente trazado se agregará y mezclará hasta una profundidad de 30 cm, 5 carretillas de estiércol de corral (gallinasa) más 10 kg de superfosfato triple. Esta operación se puede realizar con facilidad cuando el suelo esta ligeramente húmedo, empleando una lampa recta o un trinche. Luego se desterrona hasta dejar el sustrato bien mullido y nivelado.

Enseguida, se realiza el trazado y hechura de los hoyos dentro de las camas de almácigo utilizando un pequeño punzón. Los hoyos estarán distanciados a 10 cm en cuadrado, es decir 10 cm entre plantas y 10 cm entre hileras. En cada hoyo se coloca una semilla pregerminada de camu camu, cubriéndose luego esta semilla con una capa delgada de tierra a un cm de profundidad del nivel del suelo. También se puede sembrar en cada hoyo plántulas con 5 pares de hojas. No es conveniente emplear densidades mayores por que afectan el crecimiento de las plántulas alargando el tiempo de permanencia en la almaciguera.

Terminada la siembra se deberá realizar un riego hasta dejar la cama bien humedecida. No es necesario cubrir las macas con hojas de palmera con épocas de buena precipitación; el camu camu crece y desarrolla muy bien a pleno sol en esas condiciones. En el caso de que las siembras en las almacigueras coincidan con la escasez de lluvias si es conveniente colocarle sombra a las plantitas por unos 10 a 15 días para que no sufran los efectos del sol al mediodía.

Las principales labores culturales en la etapa de almaciguera son:

El riego será aplicado diariamente en épocas de menor precipitación hasta lograr total emergencia de las plántulas.
La fertilización se inicia cuando las plántulas tengan 20 cm de altura. La fertilización al suelo se hará utilizando 50 g de urea más 25 g de cloruro de potasio por metro cuadrado. Se realizará 3 abonamiento durante el tiempo que dura la etapa de almaciguera (6 meses). Si se desea efectúa abonamiento foliar, este puede realizarse con urea (3 a 5 por mil o una cucharada por mochila de 20 litros) más el respectivo adherente.
Los deshierbos se realizan utilizando machetes. La cama de almácigo se deberá mantener limpia de malas hierbas para lograr un crecimiento más rápido de las plantitas.
La principal plaga que afecta el crecimiento del camu camu son los ácaros; estos se encuentran en las puntas de crecimiento impidiendo el desarrollo de las plantitas. El control se realiza en forma eficiente con el uso de cualquier acaricida comercial.
Las plántulas que formen más de un brote deberán ser podadas con el objetivo de que el portainjertro esté conformado por un solo tallo hasta una altura de 30 cm del suelo.
En la almaciguera las plántulas de camu camu deben permanecer 6 meses hasta lograr una altura promedio de 0.8 m y un diámetro entre 6 y 9 mm. En estas condiciones las plántulas están listas para ser trasladados a la injertera. Llevar plantas de menor tamaño requerirán de un tiempo adicional de crecimiento en la injertera.

4. MANEJO EN INJERTERA

Trasplante de plantas de camu camu a la injertera.

La injertera es el lugar donde serán injertados las plantas de camu camu con yemas de clones mejorados y donde las plantas deberán permanecer hasta ser trasplantados al campo definitivo. El tiempo que comprende la etapa de injertera es de alrededor de 12 a 14 meses, período requerido para lograr plantones de buen vigor para el trasplante: 4 meses desde el trasplante hasta el injerto y 8 a 10 meses del injerto al trasplante a campo definitivo.

El lugar escogido para las injerteras debe tener un suelo franco arcilloso, pudiendo ser hasta franco pero no arenoso, el camu camu no crece bien en suelos arenosos.

Se marca el terreno requerido para la injertera y se limpia hasta dejarlo libre de malezas. Utilizando estacas de 0.50 m de largo se marcan las hileras separadas a 0.60 m y con un cavador se hacen los hoyos en cada hilera, a distanciamiento de 0.40 m, procurando que los hoyos estén alineados. Los hoyos deben estar a una profundidad de unos 25 cm y un diámetro similar a la que puede hacer un cavador.

El trasplante de las plántulas del almácigo hacía la injertera servirá como una segunda fase de selección del material de propagación del camu camu (la primera fase fue en la etapa de semillero). Las plántulas pequeñas o raquíticas deben ser descartas, sólo aquellas que muestren buen vigor, es decir aquellas que hayan logrado alturas y diámetros superiores a 0.70 m y 7 mm, respectivamente.

Las plántulas serán extraídos de los almácigos con una pequeña champa de tierra para asegurar su sobrevivencia después del trasplante. Las plántulas a raíz desnuda sufren los efectos del medio ambiente principalmente cuando existe mucha insolación y pueden secarse en unos días del trasplante si no se riegan (Figura 3).

Un día antes a la extracción de plántulas del almácigo se deberá mojar bien las camas almacigueras dejándolas drenar par facilitar la extracción de las plántulas y agilizar la operación del trasplante.

Para la extracción de las plántulas de los almácigos se sugiere emplear un machete. Se introduce el machete al suelo unos 15 cm, en forma inclinada, alrededor de las raíces. Cuando la champa de tierra esté debidamente formada se realiza el corte de la raíz principal. Luego se extrae la planta con su champa de tierra.

Para asegurar mayor porcentaje de sobrevivencia al trasplante, esta actividad se deberá hacer en épocas lluviosas. No es conveniente realizarlo en época secas por las altas tasas de mortandad observadas. Por este motivo, el trasplante a la injertera debe coincidir con los días lluviosos. Caso contrario será necesario realizar riego adicional con baldes.

En la injertera se presenta el brotamiento lateral del patrón, en grado variable, según el ecotipo que se utilice. El fenómeno es la reacción natural de la planta debido que el brote terminal disminuye en desarrollo con el trasplante. Estos brotamientos laterales distraen el crecimiento de la planta, la cual demora más en engrosar. Por este motivo se deberá podar los patrones en forma continua. La poda consiste en mantener el tallo principal sin brotes hasta una altura de 40 cm. Todos los brotes que emerjan del tallo principal por debajo de la altura indicada deberán ser eliminados porque los injertos se realizan a 30 cm sobre el nivel del suelo.

Injertación

Consiste en retirar una porción vegetativa de una planta seleccionada par luego unirla en otra planta, mediante un corte realizado tanto en la vara yemera como en el patrón.

Época de injertación

La época más apropiada para la injertación son los meses que corresponden a la mayor precipitación en la zona, porque condiciona buena humedad en el suelo para la actividad cambia y permite la cicatrización rápida de las heridas.

En la época seca se deberá paralizar las actividades de injertación hasta el inicio de las lluvias, aunque esta limitación podría ser obviada cuando se cuente con un injertador de buena experiencia y posibilidad de regar la injertera.

Clones

Las varas yemeras a utilizarse para los injertos se deberán obtener solamente de ramas del año de plantas adultas seleccionadas por sus buenas características. El Programa de Investigación en Cultivos Tropicales cuenta en la Estación Experimental Pucallpa con 8 selecciones de plantas con alta producción, destacando en 4 selecciones que producen 15 a 25 kg de fruto por planta. Además, el PICT tiene en la EEA San Roque, un banco de germoplasma donde esta evaluando los clones nativos de toda la amazonía peruana (Mendoza et al, 1989). Este germoplasma constituye el material que será propagado en el futuro, una vez que se tengan los resultados de las evaluaciones del mismo.

Injerto por astilla
El método de injerto usado es el de astilla, que consiste en realizar un corte que penetre en el patrón una cuarta parte del grosor del mismo y, por arriba, aproximadamente a 2 cm, se hace un segundo corte hacia abajo, hasta que conecte con el primero. Los cortes para remover la yema se hacen exactamente iguales a los ejecutados en el patrón. Después de realizado los cortes respectivos tanto en el patrón como en la vaya yemera, se coloca la yema con astilla en el patrón, luego se realiza el amarre cubriendo con la cinta plástica toda la yema. El amarre con la cinta plástica deberá permanecer durante 60 días hasta que las heridas de los cortes cicatricen bien (Foto 2, 3 y 4). Las principales etapas del injerto, descrito por Enciso (1992) se presentan en la Figura 4.

El diámetro adecuado del tallo del patrón para los injertos de astilla es de 6 a 9 mm de grosor a 30 cm de altura sobre el suelo. Las plantas deben tener 0.70 a 1.0 m de altura, respectivamente.

Después de 60 días de haberse realizado el injerto los cortes estarán bien cicatrizados (Foto 4). En este momento se procederá con el corte a bisel del patrón (despatronado) 5 a 10 mm y encima del injerto, con la finalidad de estimular el rebrote de la yema del injerto. De no realizarse este corte la yema del injerto permanecerá dormida; en cambio, el corte del patrón estimula el brotamiento de las yemas en el injerto (Foto 5).

Existen otros métodos de injerto que también se pueden usar, pero la ventaja del injerto de astilla es que requiere menos material vegetativo para lograr un mayor número de plantas injertadas. Esta ventaja es importante cuando no se dispone de suficiente número de yemas para injertar los patrones.

Cuidados después del injerto
A los 10 días de haberse realizado el despatronado o desmochado, el patrón comienza a emitir nuevos brotes por debajo o cerca del injerto. El número de brotes emitidos varía, según el vigor del patrón (Foto 6). Todos los brotes del patrón deben ser eliminados en forma continua (Foto 7). Las podas después de la injertación se tendrán que realizar hasta que el injerto haya logrado el rebrote y exista dominancia apical por el injerto, es entonces cuando el patrón dejará de emitir más brotes. Estas podas también favorecen que el injerto desarrolle rápidamente.

Cuando el injerto tenga una longitud de 30 cm será conveniente colocar tutores para evitar se quiebre y permita un crecimiento recto. El injerto será amarrado a los tutores que pueden ser de bambú y deben tener 1 metro de largo. El tutor se mantendrá por unos 2 a 3 meses hasta que el injerto pueda sostenerse por sí solo (Figura 5).

Por último, los deshierbos son fundamentales en esta etapa. Es conveniente tener la injertera libre de malas hierbas para evitar la competencia con el cultivo y daños en los injertos.

Esta actividad se deberá realizar con cuidado sin quebrar el injerto (injerto quebrado en la zona del injerto es injerto perdido).

Cuando el injerto tenga a un diámetro similar al patrón en la zona de unión, estará listo para ser llevada al campo definitivo.

Poda de formación en vivero
Se recomienda que las plantas injertadas sean podadas a unos 30 a 40 cm sobre el injerto (que a su vez se realiza a 30 cm sobre el suelo), a fin de provocar la formación de ramas del injerto, los que servirán para formar la copa de la planta a partir de esta altura. En tanto no se tengan resultados de las investigaciones en proceso, ésta es la altura tentativa para la primera poda en vivero.

No debe permitirse que se formen ramas debajo de los 50 cm como primera poda de formación en vivero y si están formado, estas ramas deben ser podados. La poda a 30 cm del injerto no solamente regulará la altura en que se formen las ramas sino que también reducirá pérdidas de agua por evapotranspiración.

5. EXTRACCIÓN DE PLANTAS DE LA INJERTERA

Cuando el vivero se encuentra cercano a la plantación definitiva y el suelo tenga abundante contenido de arcilla, se puede extraer la planta injertada manteniendo fácilmente un champa de tierra alrededor de las raíces. Con una herramienta bien afilada, corte las raíces en un círculo de unos 20 cm de diámetro, a una profundidad de 30 cm y se levanta el arbolito con la champa de tierra. Este método permite prendimientos de 100 % después del trasplante al campo definitivo (Figura 6).

Cuando se quiere trasladar plantas a lugares distante es conveniente retirar la tierra que cubre las raíces y envolver las raíces con papel periódico húmedo y luego introducirlo dentro de sacos de polipropileno. Este procedimiento permite mantener las plantas sin marchitarse hasta por 10 días. Para tener éxito con este método se tiene que mantener bien la humedad dentro los sacos; en todo momento tiene que haber buen contacto del papel húmedo con las raíces de las plantas. Si no se cuida este factor las plantas pierden humedad y mueren en el trasplante. Inmediatamente después del trasplante se deberá regar las plantas, si es que no llueve. En caso que el verano sea demasiado prolongado se tendrá que realizar riegos permanentes hasta que las plantas hayan prendido. Los porcentajes de prendimiento con este método son cercanos a 100 %.

6. CONCLUSIONES

En el germinadero

Las semillas de camu camu deben ser extraídos cuando los frutos estén maduros. Las semillas grandes y medianas deberán ser seleccionadas previo a los trabajos de pregerminado.

Para el pregerminado de las semillas se recomienda utilizar recipientes o camas de almácigo que tenga como sustrato aserrín.

En el almácigo

El tipo recomendado de camas de almácigo para el camu camu es el de cama a desnivel, porque permite retener humedad después de cada lluvia o riego

Las plántulas que tengan 10 cm de altura y 5 pares de hojas deben ser retiradas de los germinaderos y ser trasladados a las almacigueras para continuar el crecimiento.

Las plantas deben permanecer en los almácigos por más de 6 meses y cuando logren el diámetro de 6 a 9 mm en la base del tallo deberán ser trasladada a la injertera.

En la injertera

Las plantas que han logrado el grosor 7 mm a 30 cm de altura, pueden ser injertadas por el método de astilla. Alrededor de 60 días después del injerto se desatarán las ataduras de plástico y 15 días después se cortarán los patrones en forma de bisel por encima del injerto. Todos los brotes del patrón, deben eliminarse a los 10 días después de haberse realizado el despatronado. La eliminación de brotes del patrón debe ser realizada periódicamente. El injerto tome un grosor similar al patrón.

Cuando el injerto tenga una longitud de 30 cm será conveniente colocar tutores para evitar se quiebre y permita un crecimiento recto.

Las plantas de camu camu deben ser podadas en vivero a una altura de 30 cm por encima del injerto, para promover la formación de la copa.

Del trasplante al campo definitivo

Las plantas están aptas para llevarlas a campo definitivo cuando el injerto tenga un grosor similar al patrón. En este momento pueden ser extraídas con champa o a raíz desnuda, para realizar el trasplante, debiendo seguirse una técnica especial en caso de trasportarlas a grandes distancias.

7. LITERATURA CITADA

CALZADA, B. 1980. 143 Frutales Nativos. Ed. El Estudiante.
Lima. 314 pp.

CALZADA, J. 1985. Algunos frutales Nativos de la Selva Amazónica de interés para la industria. Instituto Interamericano para la Agricultura. Publicaciones Misceláneos Nº 602. ISSN - 5391 IICA. Lima. 44 p.

ENCISO, R. 1992. Propagación del camu camu (Myrciaria dubia) por injerto. Informe Técnico Nº 18. Programa de Investigación en Cultivos tropicales. INIA. Lima 17 pp.

MENDOZA, O. Et al. 1989. Informe de Expedición de Recolección de germoplasma de camu camu (Myrciria dubia) en la Amazonía Peruana. Informe Técnico Nº 11. Programa de Investigación en Cultivos Tropicales. INIA. Lima 19 pp.

TANCHIVA, F.E. et al. 1992. Manejo y Conducción de viveros Frutícola. Manual Técnico. Serie Guía Didáctica Nº 1. INIA-AECI-Gobierno regional. EEA San Roque. Iquitos. 14 pp.

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