III. REVISION BIBLIOGRAFICA

HART (1985), el objetivo del análisis de sistemas de producción lo define como la relación entre la estructura y función del sistema a fin de diseñar sistemas más eficientes.

HSORTON (1984), considera que las encuestas mediante cuestionarios son actualmente una herramienta aceptada por los científicos sociales y todos aquellos que se ocupan de problemas del desarrollo en áreas rurales.

AGUILAR et al. (1989), mencionan que los factores que más influyen en los ingresos agropecuarios son: el tamaño de la explotación, la tasa de producción, la combinación de actividades, la intensidad de producción y la eficiencia de la mano de obra.

LEON Y QUIROZ (1994), indican que la evaluación biológica es utilizada para determinar la eficiencia y selección de los agroecosistemas en relación a un mismo tipo de cultivo, para la ubicación de alternativas tecnológicas. Se basa en relacionar la producción de cada cultivo con el promedio que se obtiene en la zona, ponderada con el área utilizada en la finca.

HART (1985), considera que para la evaluación biológica de los sistemas de cultivos existen índices como : a) Producción total : biomasa total del cultivo, biomasa de valor agronómico (rendimiento), b) Ingreso bruto: la suma del valor de los productos generados por el sistema, c) Energía acumulada en la biomasa total, o en la biomasa asimilable por el hombre, e) Proteína acumulada que es asimilable por el hombre, e) Eficiencia energética: porcentaje de la energía disponible (como radiación solar) que es fijada en la biomasa total de los cultivos y puede estar entre 0,5 y 3% de la energía disponible, f) Indice de energía cosechada: porcentaje de la energía fijada en la biomasa total, que es asimilable por el hombre , g) Uso Equivalente Tierra (UET), h) Indice de variabilidad relativa.

HENK y BRINKE (1990), indican que para poder producir es necesario invertir capital, y el porcentaje de interés que se obtiene del capital invertido por medio de la producción se llama rentabilidad, y para encontrarlo se consideran tanto los intereses del capital propio como del capital ajeno.

FLACHSENBERG (1984), indica que el arreglo espacial tiene una influencia importante sobre el grado de competencia entre los cultivos asociados. En primer lugar se debe seleccionar las especies por su altura superficial, por su aspecto exterior, por la profundidad y estructura de su sistema radical, para garantizar una explotación en diferentes horizontes del suelo.