CAPITULO 2
CARACTERISTICAS GENERALES DE LA ZONA DE IQUITOS
Salvador Flores Paitán, Elva Gómez Romero y Risto Kalliola
RESUMEN
Se suministra una visión general que enmarca el ámbito geográfico del estudio, mediante información sumaria disponible, la que integra el medio ambiente, sus limitaciones v potencialidades, con la dinámica de intervención humana desde la época hispánica hasta nuestros días. Se mencionan los efectos negativos de la explotación y uso irracional de los recursos naturales y su repercusión en la calidad de vida de la población; también se hace referencia a la normatividad ambiental relevante que regula la utilización racional y sostenida de los recursos naturales y sus limitaciones de aplicación. Se aborda la historia de la construcción de la carretera Iquitos-Nauta, señalando las motivaciones y el proceso de su ejecución hasta la fecha actual y sus implicancias en el área de su influencia y las repercusiones en el desarrollo regional. También se hace un breve análisis sobre el uso actual de la tierra en las diferentes actividades productivas y se complementa con datos meteorológicos e hidrológicos que evidencian, en su conjunto, las limitaciones naturales y los riesgos de un uso no sostenido por desconocimiento de su verdadero potencial. Finalmente se citan los estudios más relevantes ejecutados y se indican las instituciones de investigación y desarrollo localizadas en el área.
El ámbito de estudio que concentra la investigación del presente libro, abarca una superficie cuya extensión es de 830 132 ha, y está localizada entre los meridianos 72'50'y 73'40'de Longitud Oeste y los paralelos 3034'y 4'53'de Latitud Sur (Figura 2.1). El área esta situada en la parte nororiental del Perú, en la región natural denominada selva baja u omagua. Desde el punto de vista político comprende parte de las provincias de Loreto y Maynas, del Departamento de Loreto, que conforman la Región Loreto, el espacio territorial más extenso del Perú, que cubre una extensión de 368 852 km2, lo que representa el 28,7 % del territorio nacional.
Los mayores centros poblados en el área de estudio lo constituyen la ciudad de Iquitos, Capital de la Provincia de Maynas y Capital del Departamento de Loreto, y la ciudad de Nauta, Capital de la provincia de Loreto, ambas en conjunto totalizan una población estimada en 1996 de 331363 habitantes, correspondiendo a la ciudad de Iquitos el 95,7 % y a la ciudad de Nauta el 4,3 %. La tasa de crecimiento promedio poblacional entre 1981-1993 fue de 3,6 % en el ámbito de Iquitos, 6,8 % en el ámbito de Nauta y de 7,4 % en la población asentada en el eje de la carretera Iquitos-Nauta (SEGECO 1997).
Las principales vías de comunicación fluvial lo constituyen los ríos Marañón, Amazonas, Nanay e Itaya. Los pobladores de los caseríos ubicados cerca a las orillas de los principales ríos, utilizan este medio con cierta frecuencia para transportar sus productos. La desventaja de esta vía es la irregularidad del servicio y la larga travesía que deben soportar hasta Regar a Iquitos, el mercado principal para la comercialización de sus productos agrícolas. La principal vía terrestre, es la Carretera Iquitos-Nauta; que a inicios de 1998 estaba asfaltada partiendo de Iquitos hasta las proximidades del río Itaya; y partiendo de la ciudad de Nauta tenía más de 15 Km. de carretera carrozable.
El objetivo del presente capítulo, es presentar una breve introducción a las características generales en la zona de estudio, principalmente sobre la base de revisión de la literatura, con el propósito de suministrar a los lectores, una imagen del ámbito dónde se han realizado los estudios del presente libro. Es preciso referir, que mucho de los aspectos aquí tratados, se analizan detalladamente en los siguientes capítulos del libro y se complementan con la información resultante de las investigaciones realizadas por el equipo multidisciplinario en el ámbito de estudio.
La zona de estudio, es representativa del llano Amazónico, particularmente de la zona subandina de esta región. En el nivel de biomasa, está comprendida en la Provincia Biogeográfica Amazónica Tropical; y en el nivel de ecosistemas, predomina la zona de vida Bosque Húmedo Tropical (bh-T), con precipitaciones promedios anuales superiores a 2 400 mm y temperatura media mensual superior a 24 °C (ONERN 1976, CDC-UNALM 1991). De acuerdo al mapa climático del Perú, el área de estudio se encuentra dentro del tipo de clima A(r)A'H4, que se caracteriza por ser muy lluvioso debido a la intensidad y distribución de las precipitaciones durante el año, mientras que la humedad relativa, a lo largo del año, varía entre 82 y 86 % (ver el Capítulo 3).
La heterogeneidad geológica, geomorfológica y pedológica es muy grande, como efecto de los procesos desde el Paleozoico hasta el presente (ver los Capítulos 4 y 12). La red hidrográfica en el ámbito del estudio es bastante densa y está compuesta por ríos y quebradas, como el Amazonas, Marañón, Ucayali, Nanay, Itaya, Tamshiyacu, Momón, y Manití, entre otros, que son utilizados como medios de navegación y transporte, y en pequeña escala, como fuentes de agua para satisfacer las necesidades primarias de las comunidades asentadas en la zona. De estos ríos, la llanura meándrica del río Amazonas es bastante compleja, dinámica y cambiante (Kalliola et al. 1992, García & Bernex de Falen 1994 ' Tuukki et al. 1996). También las características físicas y químicas de las aguas en los ríos son variables y existen numerosos lagos de distinto origen y de características muy variables.
Los suelos inundables por el río Amazonas son de buen potencial productivo, sin embargo presentan limitaciones de riesgos de inundación. En cambio, los suelos inundables por el río Nanay son ácidos y con baja concentración de nutrientes (Kalliola et al. 1993b). Los suelos de altura son muy variados, con predominio de Ultisoles ácidos y desprovistos de nutrientes, asociados con Entisoles dístricos (Arenosoles), Spodosoles, Inceptisoles, Alfisoles e Histosoles (Sánchez & Buo1 1974, Flores 1977, ONERN 1975 y 1982, INIPA 1983; Capítulos 5 y 6).
De acuerdo al Mapa de Clasificación de las Tierras del Perú (ONERN 1981), en el área de estudio predominan las tierras con aptitud para la producción forestal de calidad agronómica alta, con limitaciones relacionadas a la erosión. En menor proporción se encuentran tierras de calidad agronómica baja con limitaciones por drenaje, y también se encuentran áreas aptas para pastos y cultivos permanentes de calidad agronómica media, con limitaciones de suelo y erosión. En ambas riberas a lo largo del río Amazonas se encuentran tierras de protección asociadas con aquellas de aptitud para la producción forestal y cultivos en limpio de calidad agronómica media y baja, presentando limitaciones de suelo e inundaciones periódicas.
El Perfil Ambiental del Perú (ONERN 1986) determina que gran parte del área de estudio está considerada dentro de un área ambiental crítica, la que presenta desequilibrios manifiestos debido a la alteración combinada de los asentamientos humanos (calidad de vida) y los recursos físico-biológicos (agua, suelo, fauna). Esta alteración está relacionada con el desarrollo de actividades agrícolas y pecuarias en aquellas tierras mayormente aptas para la producción forestal. En el Mapa Geoecológico de selva baja de la Amazonía peruana (Räsänen et al. 1993b), la zona de Iquitos consta de las siguientes categorías del ambiente: Relieve disectado en al noreste de la selva baja, Terrazas aluviales pleistocénicas; Cuencas inundadas; Llanuras meándricas; y Vegetación pantanosa.
La cubierta vegetal está constituida por un bosque perennifolio siempreverde, que alberga muchas especies vegetales y de la fauna. Estos bosques son mundialmente famosos por que en algunos lugares, como en Mishana y Allpahuayo, se concentra una gran diversidad de plantas y animales (Gentry 1988ab). En la zona de estudio existen hábitats específicos tales como los "varillales" y "chamizales" que se encuentran en arena blanca, y que albergan un gran número de especies vegetales y animales únicas (endémicas), con un alto valor de conservación biológico (Tuomisto et al. 1995, IIAP 1996; Capítulo 7). Igualmente, en el ámbito de Iquitos se ha registrado la mayor diversidad de especies frutales nativas amazónicas y bosques con alto potencial económico. (Peters et al. 1989, Vásquez & Gentry 1989, Vásquez 1989; Capítulo 13).
El Mapa Forestal del Perú de Malleux (1975), identifica para la zona 5 unidades predominantes que son: Bosques de colina de clase 1 y II, que encontramos en los alrededores del río Momón y en el tramo inicial del río Itaya; Bosques aluviales de clase 11 y 111, localizados en el área de influencia de los ríos Amazonas, Marañón, Itaya, Manití y Tamshiyacu; y por último Aguajal, que se encuentra en una zona de la margen izquierda del río Amazonas, a la altura de la localidad de Bellavista.
El Mapa Forestal del Perú más reciente (INRENA 1996), identifica en nuestro ambiente de estudio las siguientes unidades: Bosque húmedo de colinas bajas que predomina en áreas no inundables; Bosque húmedo de terrazas medias; Bosque húmedo de terrazas bajas; y Bosque húmedo de llanuras meándricas, y Aguajales, o sean grandes rodales puros de la palmera "aguaje" (A4aurítia flexuosa). El mismo documento ha identificado una gran extensión de áreas deforestadas, destinadas a la agricultura, ganadería, centros poblados, carreteras y otros.
La deforestación, consecuencia de la agricultura migratoria no tradicional, afecta significativamente las áreas contiguas a la carretera, vías de penetración transversales carrozables y áreas contiguas a las riberas de los principales ríos, con caracteres de irreversibilidad en las tierras no aptas para las actividades agropecuarias, especialmente las tierras de arenas blancas que son de conservación. El bosque secundario está compuesto por especies heliófilas pioneras, entre estas destacan el cetico (Cecropia sp.), la uvilla (Pouroma sp.), el atadijo (Trema micrantha), la topa (Ochroma lagopus), la huamanzamana (jacaranda copaia), el zancudo caspi (Alchornea triplinervia), la pichirina (Vismia sp.), el rifari (Miconia sp.) y la ocuera (Vernonia sp.) entre las más comunes. Hasta el momento, se ha dado poco énfasis al estudio de los procesos de regeneración de los bosques; así como en lo que ocurre en las áreas deforestadas y su relación con los aspectos físicos, sociales y económicos del área (ver el Capítulo 9). Recientemente se ha despertado interés por los impactos ambientales en el área de influencia de la carretera Iquitos-Nauta (SEGECO 1997).
DINÁMICA DE POBLACIÓN
Estudios sobre la Amazonía (San Roman 1994, Pennano 1988, Club Loreto 1992), refieren que en el año 1729 se fundó el primer núcleo misionero en el Itaya, entre Yameos e Iquitos. En el año 1736 aparecen registrados tres caseríos en el Itaya. Uno de ellos, el situado en un elevado barranco en la margen izquierda del Itaya, cerca de su desembocadura al río Amazonas, el que recibió posteriormente el nombre de Iquitos. La historia regional señala que Iquitos nunca tuvo fundación republicana.
En 1842, cuando fue elevado a la categoría de distrito, ya contaba con una población de 200 habitantes. Antonio Raymondi, en su primer viaje en 1853, refiere una población de 400 habitantes. Hasta esta época el puerto de Nauta constituía el centro más importante en la zona; sin embargo, debido a la formación de grandes playas en Nauta, Iquitos fue seleccionada como foco de desarrollo. El Censo Poblacional de 1876 refiere 61125 habitantes para Loreto, correspondiendo a Iquitos 1475 habitantes, totalizando 2859 habitantes con la inclusión de Tamshiyacu y la zona rural de Iquitos.
El crecimiento rápido de la ciudad tuvo lugar en la época de explotación del caucho a partir de los último decenios de los 1800. El siglo XX significó para la zona de Iquitos una época de fuertes cambios, en su mayoría relacionados con los principales ciclos económicos. Sin embargo el crecimiento poblacional ha sido muy rápido: el número de habitantes alcanzaba 14 000 en 1903, y según el censo agropecuario noventa años después (1993), la población de la ciudad de Iquitos era 305 514 habitantes.
La población estimada en el área de influencia de la Carretera Iquitos-Nauta en 1993 totalizaba 355 379 habitantes. El crecimiento poblacional en esta zona, estimado a una tasa de crecimiento promedio anual de 3,4 %, se proyecta en 568 774 habitantes para el año 2010 (ver el Capítulo 8). Es previsible una mayor presión sobre el medio natural y sus funestas consecuencias.
USO DE RECURSOS
En diversas fuentes históricas sobre la Amazonía (San Román 1994, Pennano 1988), se relata que a la llegada de los europeos al Amazonas en el Siglo XVIII, los Omaguas y otros nativos usaban el caucho (Castilla ulei) y el jebe (Hevea brasiliensis y Hevea guianensis) para confeccionar pelotas de uso en sus juegos y jeringas de goma. En el Siglo XIX, se inicia la comercialización en pequeña escala del caucho y del jebe, a los mercados europeo y estadounidense, incrementándose la demanda con el descubrimiento del proceso de vulcanización, de miles de kilos en 1835 a cientos de miles de kilos. En 1853 se registra una exportación de 5565 kg. y en 1870 de 58 584 kg.
En 1853 se registra la exportación de 11662 kg. de zarzaparrilla (Smilax officinalis), 1835 kg. de corteza de quina (Cinchona sp.), además de otros productos como sombreros de paja (Philodendron sp.), hamacas de chambira (Astrocaryum chambira), copal (Dacryodes peruviana, Protium sp.) y pescado seco salado, entre otros. En 1884, en la era "cauchera", la exportación se incrementó: 540 529 kg. de goma elástica (distintas variedades); y además corteza de quina o cascarilla, zarzaparrilla, aceite de copaiba (Copaifera multijuga), tagua ó marfil vegetal (Phytelephas macrocarpa), cueros de venado, sombreros de paja, coca (Erythroxylum coca) y otros. Las exportaciones de goma en 1900 superaron las dos mil toneladas.
En 1910 las exportaciones de caucho y jebe (fino y débil), sobrepasaron en total los 4 millones de kg. La gran demanda de estos productos, elevó sus precios a niveles astronómicos. En aquella época, la exportación de gomales silvestres de la Amazonía estaba amenazada por la producción de goma en las plantaciones de Malasia, Birmania, India, Indochina y Africa. En 1918 se originó la crisis cauchera, como consecuencia de la debacle económica, social y política ocasionada por la Primera guerra mundial, que finalizó el referido año, concluyendo la época de las libras de oro peruanas o libras esterlinas, retirándose de circulación las monedas de oro en el Perú y sustituyéndolas con billetes.
En 1920 se diversifica la producción loretana para la exportación y se desarrollan otras actividades en el ramo de la explotación forestal, además que se incrementan los sembrados de algodón, café cultivos diversos de granos, frutas y hortalizas. En síntesis, se trataba de recuperar la capacidad productiva de alimentos que había sido sustituida por la importación en épocas de abundancia económica; y con la exportación de café y algodón, se trataba de captar divisas que eran escasas.
Los ingenios azucareros desarrollados con anterioridad, continuaron funcionando. En varios fundos gomeros, eran implantados pastizales y planteles de ganado vacuno, financiados con la explotación del jebe fino, que continuaba produciéndose en cantidad limitada y era exportado en cajas de madera fina de cedro (Cedrela odorata) y caoba (Swietenia macrophylla), embalajes con valor superior al precio que se pagaba por la goma que contenía, situación que propició la explotación selectiva de éstas especies para el mercado externo. A la explotación de madera para exportación, se incrementa la salida de cueros y pieles de animales silvestres, tagua o marfil vegetal, palo de rosa, leche caspi y balata, a precios que apenas compensaban el costo de extracción, la manipulación y los fletes de alto costo.
En los años treinta, tiene su auge la explotación del polvo de oro aluvial, inicialmente en el lecho del río Negro, afluente del río Pachitea. Más tarde, en esta misma cuenca, se halló petróleo, dando inicio a la era de la explotación de hidrocarburos en la selva peruana. Como consecuencia de estas actividades, el estado tuvo una política de desarrollo de la selva baja, que ha conllevado, por ejemplo, a la lotización de la selva con fines de prospección. Llevado por el "boom" de estas economías, y conjuntamente con el dinero del narcotráfico, abrieron el territorio amazónico en la última parte del XX siglo para un desarrollo rápido, con muchas inversiones en los centros de crecimiento, particularmente en la ciudad Iquitos. Junto con el crecimiento poblacional, estas tendencias han causado que los bosques de la zona hayan confrontado un aumento de presión para su utilización, particularmente para la producción forestal y agrícola.
Actualmente existen muchas presiones para controlar el uso de los recursos naturales, de modo que el impacto ambiental permanece a un nivel aceptable. Por ejemplo, el proceso de zoneamiento de las selvas amazónicas en general, y del ámbito de la carretera Iquitos Nauta en particular, están actualmente en marcha. En esta obra se trata el uso de diferentes recursos materiales, desde el manejo forestal y diferentes sistemas agropecuarios hasta el uso de las arenas blancas cuarzíticas para la construcción de carreteras y cemento (Figura 2.2).
La legislación peruana, a través de diferentes dispositivos legales en el tiempo, ha normado y reglamentado la utilización de los recursos naturales renovables y no renovables del país, orientando su racional utilización y conservación. También se crearon algunos instrumentos legales, como el Canon Petrolero para beneficio del desarrollo de las áreas fuente del recurso y el Canon de Reforestación, como estrategia en la reposición del recurso forestal extraído. El compendio de la legislación ambiental más relevante registra un total de 105 normas promulgadas hasta octubre de 1997 (INRENA-DGMAR 1996, Campos 1997, El Peruano 1997). Entre los principales dispositivos legales, se han promulgado La Constitución Política del Perú, vigente desde 1993; el Código del Medio ambiente y los Recursos Naturales (1980), Ley N'26410 de 1994 que creó el Consejo Nacional del Ambiente (CONAM); Ley N'26793, que crea el fondo nacional del ambiente; El Reglamento de organización y Funciones del CONAM (1997): Ley N'26839 de junio de 1997, sobre la conservación y aprovechamiento sostenible de la diversidad, que norma la conservación de la diversidad biológica y la utilización de sus componente; y la Ley Orgánica para el aprovechamiento sostenible de los recursos Naturales, Ley N° 26821 de junio de 1997, que norma el régimen de aprovechamiento sostenible de los recursos naturales. Aún están en estudio la nueva Ley Forestal, actualizada y armonizada con el Código del Medio ambiente y otras normas ambientales relacionadas. Si bien se dispone de abundante normatividad ambiental, su incumplimiento y falta de aplicación de sanciones, restringen su efectividad.
Figura 2.2. Los lugares dónde abundan las arenas blancas son importantes fuentes de arena en la región, que puede ser utilizada para construcción de carreteras y ciudades. Peñanegra, enero de 1996. (Foto: ISRIC/Kauffman). |
AGROPECUARIA - AGROFORESTAL
Según las Estadísticas e Informes Oficiales de la Dirección Regional de Agricultura de Loreto (DRAL/ AAM 1996), en la Provincia de Maynas, existen 20 428 unidades agropecuarias que abarcan un área de 238 719 ha en uso. Iquitos concentra el 85,5 % de las unidades agropecuarias existentes y el 89,7 % de la superficie explotada (214 049 ha).
En éste ámbito, la agricultura es la fuente principal de ingresos y ocupación de más de 100 000 personas; está caracterizada por su limitado desarrollo, que presenta bajos niveles de producción y productividad y está orientado básicamente al autoconsumo y al abastecimiento interno. Los principales cultivos anuales son plátano, yuca, arroz y maíz, Las producciones logradas en las tierras fértiles inundables, son bastante buenas; sin embargo son transitorias e inestables. En los suelos de altura, de suelos de limitada fertilidad natural, la producción es baja, con una capacidad productiva de una a dos cosechas y luego al abandono a la regeneración natural, propiciando la migración en un corto plazo. Otros problemas que afectan la agricultura son los altos costos de producción, el reducido mercado y la falta de mercado.
Los cultivos perennes tienen menor desarrollo. La producción de papaya (Carica papaya) está orientado al mercado. La piña (Ananas comosus) tiene buenas perspectivas industriales, pero tiene limitantes como la falta de mejora genética para obtener uniformidad y la afección por plagas y enfermedades que disminuyen su valor comercial. El cultivo de cítricos (Citrus sp.) es incipiente; también es afectado por minadores de hojas y enfermedades virosas y bacterianas. El cultivo de cacao (Theobroma cacao) ha sido prácticamente abandonado por su baja productividad y falta de mercados, mientras el pijuayo-palmito (Bactris gasipaes) está siendo promocionado especialmente en la carretera Iquitos-Nauta, habiéndose constituido la Empresa Nauta para su industrialización. La producción natural del camu camu (Myrciaria dubia) tiene mercado externo seguro para la compra de pulpa y existen empresas organizadas para su comercialización; es una especie con gran potencial económico cuyo cultivo se ha promocionado recientemente (Capítulo 14).
La producción pecuaria es incipiente. Desde 1981 se ha promocionado la ganadería (Figura 2.3) con importación de búfalos, sin embargo existen problemas de alto costo de vientres, falta de pastos y falta de capacitación a los productores en el manejo de éste ganado. Dentro de la actividad pecuaria, la avicultura tiene la mayor importancia económica, orientada a la producción de carne y huevos, pero enfrenta el problema de la dependencia de insumos externos.
La agroindustria es bastante limitada y está concentrada en el apilado de arroz, el aserrío de la madera, el procesamiento de caña de azúcar, la producción de alimentos balanceados, quesos y embutidos, la elaboración de mermeladas, jaleas y néctares de frutales nativos, y enlatado de palmito de huasaí (Euterpe oleracea) y palmito de pijuayo.
La comercialización, que se basa en la libre oferta y demanda, afronta problemas de dispersión y debilidad de la demanda, de bajos costo de los productos agropecuarios, y altos costos tanto de los insumos como de los productos elaborados de mayor demanda del agricultor. El problema se acentúa con la liquidación de las Empresas Estatales (ENCI y ECASA), que dejaron un vacío en la compra de productos al agricultor y que favorecen la participación de los intermediarios que son los que se benefician con ésta situación.
La agroforestería es nueva como actividad productiva y recientemente está siendo promocionada, con sustento de investigación, en campos de agricultores de la carretera Iquitos-Nauta, en la cuenca del río Itaya, en la cuenca del río Nanay, y en el bajo Marañón, en las localidades de 9 de Octubre, Túpac Amaru, San Antonio, San Jorge, San José de Sarapanga, Santa Fé, San Regis, Villa del Buen Pastor, localidades pertenecientes al ámbito de Nauta (Flores 1998b, Capítulo 10).
Figura 2.3. La ganadería extensiva es una de las actividades agropecuarias que caracteriza la zona de la Carretera Iquitos-Nauta. El bosque original ha sido reemplazado por pastizales, caracterizados por una muy escasa biomasa de hierbas y poca población de ganado. El cambio microclimático es bastante fuerte, lo que se puede percibir al salir de éste ecosistema e ingresar al ambiente sombreado del bosque (Foto: ISRIC/Kauffman). |
FORESTAL Y FAUNA
Las Estadísticas e Informes Oficiales de la Oficina Regional del Instituto Nacional de Recursos Naturales de Loreto (OFIRENA 1998 y 1997) indican, que las actividades vinculadas con la explotación de los recursos forestales y de fauna silvestre, son muy importantes y dependientes de la variada oferta ambiental de éstos recursos en la región. En el aspecto forestal, el mayor problema está constituido por el aprovechamiento selectivo de especies forestales de alto valor comercial. En 1997 la producción total de madera en el departamento de Loreto fue de 360 745,0 m3 ' correspondiendo el 61,8 % a madera rolliza (35 especies), 21,9 % a madera aserrada (24 especies), 0,8 % a madera laminada (2 especies), 10,1 % a triplay (3 especies), 1,5 % a madera redonda (8 especies) y 3,9 % a madera para leña (17 especies); la producción de carbón fue de 473,2 toneladas métricas (28 especies). La producción total de productos forestales diferentes a la madera, fue de 702,9 toneladas (cortezas, raíces, hojas, semillas, pulpa de frutos, palmito), correspondientes a 24 diferentes especies herbáceas, arbustivas, lianas y árboles y 12 060 litros de látex de sangre de grado (Croton draconoides). Respecto a la fauna silvestre, en 1997 se comercializaron en total 29 196 pieles negras correspondientes a dos especies de animales silvestres sajino (Tayassu tajacu) y huangana (Tayassu pecari).
Si comparamos la producción forestal y de fauna silvestre de 1997 respecto a 1992, se registra un incremento de 410 % en la producción de madera rolliza; 286 % de incremento en la producción de madera aserrada; 116 % de incremento en la producción de madera laminada; 217 % de incremento en la producción de triplay; 128 % de incremento en la producción de madera para leña; 158 000 % de incremento en la producción de carbón; 121 % de incremento en la producción de productos diferentes a la madera; y una disminución en -2,3 % en el comercio de pieles negras. Estas tendencias nos ilustran la persistencia de la presión sobre los recursos forestales. También es evidente la reducción en el comercio de pieles, por disminución de la demanda en los mercados internacionales, como consecuencia de la efectividad de las políticas vigentes sobre conservación de los recursos naturales y del medio ambiente.
El total de permisos de extracción forestal otorgados en 1997 (OFIRENA 1998), fueron en número de 362, y correspondieron a un volúmen total de 866 124 m 3 ; el 93,8 % correspondió a unidades de hasta 1000 ha, el 4,1 % a unidades agropecuarias, y el 2,1 % a productos diferentes de la madera. Comparados estos valores con los de 1992 (DRAL/01A 1994), se registra un incremento de 412 % en el número de contratos de extracción hasta de 1000 ha, 173 % de incremento en la cantidad de hectáreas y de 340 % de incremento en el volúmen de madera. En el mismo año de 1997 (OFIRENA 1998), el comercio total de madera aserrada fue de 73 328,0 m3 y correspondió el 9,5 % al mercado local, el 69,8 % al mercado nacional, y el 20,7 % al mercado internacional. El conjunto de estas informaciones referenciales, es indicativo de la importancia económica de la actividad forestal y de la presión que se ejerce sobre el medio natural.
La pesca, que es la actividad económica más importante de las poblaciones ribereñas, es fuente de ingreso monetario y de autoabastecimiento de proteínas en la dieta del poblador, complementada con la caza, que aún subsiste en las áreas menos disturbadas las que no existen en las áreas contiguas a la carretera por efectos de la deforestación indiscriminada. La piscicultura, es una actividad intensamente promocionada en las comunidades localizadas en tierra firme, donde las posibilidades de pesca son mínimas.
CARRETERA IQUITOS-NAUTA
La necesidad de la carretera Iquitos-Nauta (López 1991) se remonta a 1885, época en que la naturaleza formó una isla frente al puerto de Nauta, aislando a la ciudad de la ruta de vapores y lanchas de todo tipo. En 1905 y 1927 los pobladores pretendieron abrir canales en la isla sin mayor éxito, constituyéndose la construcción de una carretera en una opción. Pero esta perdió interés al trasladarse la población a Iquitos. En febrero de 1961 se formó un Comité Pro-Construcción de la carretera Iquitos-Nauta, que fue oficializado en abril del mismo año. Esta comisión atravesó por la selva y se conectó a la trocha abierta hacía 10 años y llegó a Iquitos.
La construcción de la carretera se inició en 1970, sin ningún estudio previo, ni siquiera de su trazo. En 1980 se hizo el estudio detallado de la obra, y en 1981, por Convenio del ORDELORETO con la Dirección General Forestal y de Fauna del Ministerio de Agricultura, se hicieron los estudios de suelos y de bosques así como superficialmente del impacto ambiental. La construcción de esta carretera ha sido severamente cuestionada por Dourojeanni (MA/DGFF/ORDELOR 1981) y Alvarez (1997). Las motivaciones políticas de su construcción fueron diversas: aprovechar los recursos naturales disponibles, en especial tierras con aptitud agropecuaria y bosques, para abastecer mejor a Iquitos; lograr que parte de los moradores de los pueblos marginales de Iquitos, se dediquen a actividades agrícolas a lo largo de la carretera y abandonen la ciudad; descongestionar el Puerto de Iquitos, captando en Nauta el flete que llega por el río Marañón; iniciar por Iquitos, el tramo carretero que en el futuro llegaría hasta Chiclayo, en la Costa; abaratar los costos de las actividades petroleras, haciendo llegar la carretera, en un futuro impreciso, hasta la zona de explotación; y crear una ciudad modelo amazónica en Nauta, que sirva para un desarrollo concentrado.
Es una carretera de primer orden, con una longitud de aproximadamente 95 Km. hasta la ciudad de Nauta. Su construcción inicialmente estuvo a cargo del Ministerio de Transportes, y luego del Batallón de Ingeniería de Combate N'5 del Ejercito en Convenio con ORDELORETO. Hasta 1981, la carretera llegaba al Km 35 Campamento Militar Otorongo; en este tramo, no existían estudios de proyectos de ingeniería definitivos. De 1981 a 1991, la construcción de la carretera hasta el Km. 51, estuvo a cargo del Ejército y de la CORDELOR (por administración), con fondos del Canon petrolero. En 1995, el Consejo Transitorio de Administración Regional, Región Loreto, priorizó la reconstrucción y asfaltado de la carretera. Una empresa privada fue seleccionada y contratada para la continuación de la obra financiada por el Gobierno Regional de Loreto. A inicios de 1998, el tramo de Iquitos hasta el cruce con el río Itaya, que es carretera afirmada, ya está asfaltada en menor extensión (Figura 2.4). Desde la ciudad de Nauta hacia Iquitos, existe una carretera carrozable hasta el Km. 15 y trochas abiertas hasta las proximidades del río Itaya. El puente que cruza el río Itaya está en las últimas etapas de su construcción.
El área de influencia de la carretera Iquitos-Nauta es aproximadamente de 125 000 has. En 1981 se constató la ocupación de 25 000 ha, correspondiendo aproximadamente el 50 % a cultivos y la diferencia a purmas (bosques secundarios). En 1980 a no daban tierras agrícolas para ser habilitadas alrededor de la carretera, quedando únicamente tierras con aptitud forestal. La fauna silvestre, era explotada con intensidad (CTAR-RL/IIAP 1996a).
Figura 2.4. Carretera recién asfaltada en las cercanías de Allpahuayo, en setiembre de 1997 (Foto: Kalliola). |
Actualmente los centros poblados ubicados a partir del km. 40 y en las vías transversales de penetración, afrontan la inexistencia del servicio de transporte. Los productos de estos centros poblados son transportados a pie hasta el paradero final y de allí embarcados en vehículos que prestan este servicio. Es también perceptible la deforestación y deterioro en las áreas adyacentes a los tramos extremos de la carretera y a un incremento efímero en la explotación de recursos en el tramo de la carretera en construcción. Otros cambios también observados, por influencia del avance de la carretera son: la aparición de nuevos núcleos poblacionales y el crecimiento de las poblaciones más antiguas; el incremento en las demandas de servicios de salud y de educación; un aumento notable en el tráfico vehicular motorizado de vehículos diversos como "motocars", autos, camionetas, ómnibuses, camiones y tractores entre la ciudad de Iquitos y los tramos accesibles de la carretera, situación que se incrementará cuando se culmine la obra e integre a la ciudad de Nauta. Además se espera que la interdependencia económica de estas ciudades presentará muchos cambios, especialmente porque el puerto de Iquitos tiene problemas con la dinámica del río Amazonas y Nauta puede así convertirse, por lo menos temporalmente, como un puerto - ciudad - satélite de Iquitos (Zagaceta 1996).
Sin embargo se prevé que los cambios más severos se expresen en mayores incrementos de las tasas de deforestación y en el uso de la tierra. La extracción de recursos naturales desde madera redonda hasta carbón de leña, conjuntamente con la producción agropecuaria temporal de dos a tres años, originarán economías de muy corta duración. Esta situación puede originar una gran extensión de tierras abandonadas, empurmadas y deterioradas, con unos centros poblados que viven en condiciones de pobreza. Esto no representa ninguna atracción para economías de mayor duración, como el ecoturismo. Una alternativa extrema para este tipo de desarrollo será que la economía continúe siendo productiva, lo que es una opción posible de lograr a través de un desarrollo bien planificado y controlado, dónde el ordenamiento territorial reconozca las potencialidades que tienen los diferentes tipos de tierra que conforman el ecosistema natural, deje una parte de los bosques en protección y aplique métodos apropiados para el manejo integral y sostenido de los recursos naturales.
INVESTIGACIÓN, INSTRUMENTO PARA EL DESARROLLO
El ámbito de estudio, particularmente el área de influencia de la carretera Iquitos-Nauta, ha centrado la atención política y de la comunidad científica local, nacional e internacional. En la búsqueda de opciones para facilitar el desarrollo sostenible, tanto la participación política como la científica, han ejecutado estudios de diverso alcance. La Secretaría Pro Témpore del Tratado de Cooperación Amazónica, ha tenido relevante participación, expresada en su numerosa producción bibliográfica relacionada con el medio ambiente amazónico y su conservación; igualmente, la participación destacada de investigadores locales y de otras nacionalidades. Entre las publicaciones con temática ambiental específica para el ámbito de estudio se citan: Zonificación Ecológica Económica del Area de Influencia de la Carretera Iquitos-Nauta (CTAR-RL/IIAP 1996b), Estudio Ambiental de la Región Loreto (Quijandría & Caballero 1994), y Estudio de Impacto Ambiental de la Carretera Iquitos-Nauta (SEGECO 1997). Las informaciones suministradas son valiosas, sin embargo en algunos casos, las escalas de los estudios ó la definición de representatividad de áreas sin estudios detallados ó la incongruencia metodológica en los estudios de Impacto ambiental (ver por ejemplo Raua & Wooten 1980, Wathern 1992) limitan su aplicabilidad.
Otras publicaciones de importancia realizadas en la región, son: Inventario de recursos Iquitos, Nauta, Requena y Colonia Angamos (ONERN 1975); Evaluación de suelos y de recursos para el desarrollo agrario del área de influencia carretera Iquitos-Nauta (MA/DGFF/ORDELOR 1981); Evaluación de purmas en Iquitos (Blain 1996); Programa desarrollo integral Nauta-Iquitos-Mazán (CORDELOR 1987); Programa de apoyo para el desarrollo de los asentamientos humanos de la carretera Iquitos-Nauta (CORDELOR-ICI 1988); Zonificación ecológica y económica carretera Iquitos-Nauta (CTAR-RL-IIAP 1996b); Propuesta creación de la zona reservada Allpahuayo-Mishana; Evaluación del Proyecto "Programa de apoyo al desarrollo de asentamientos humanos de la carretera Iquitos-Nauta (López 1991); Estudio detallado de suelos y reconocimiento de cobertura y uso de la tierra (Iquitos) (ONERN/GRL/AECI 1991); Cultivo de frutales nativos amazónicos presentando manual para el extensionista (Flores 1997a), El plan para el desarrollo sostenible de la carretera Iquitos-Nauta (CTAR-CEM-DRPP 1997); y Flórula de las reservas biológicas de Iquítos, Perú (Vásquez 1997).
Un otro grupo de publicaciones internacionales contienen información sobre el uso de recursos naturales en diferentes partes de la zona de estudio, por ejemplo de valoración de bosque en Mishana (Peters et al. 1989); evaluación de frutales nativos en Iquitos (Vásquez & Gentry 1989); aspectos de desarrollo y condiciones ambientales (Kalliola & Flores 1977); y un mayor grupo de estudios socioeconómicos sobre el uso recursos naturales (Hiraoka 1985, 1986 y 1989a,b, Padoch et al. 1985, Padoch & de Jong 1987, Coomes 1995, Hiraoka 1995, Coomes et al. 1996, Coomes & Burt 1997).
Entre las Instituciones Nacionales de Investigación con campos experimentales en el ámbito de estudio en general y en la carretera Iquitos Nauta en particular, sobresalen el IIAP, con su Estación de Allpahuayo, en el km. 25; el INIA, con su Estación Experimental el Dorado en el km. 40 y la Isla Muyuy en el río Amazonas; y la UNAP con sus campos experimentales en Puerto Almendra, Zúngaro Cocha y en San Gerardo en el km. 19,5 de la carretera. Son también numerosas las ONG's que en diversas oportunidades trabajaron en la carretera Iquitos-Nauta. Es relevante la participación del Gobierno de Loreto con el Fondo Contravalor Perú - Canadá y el Gobierno peruano con el Fondo Contravalor Perú - España.
Entre las instituciones que realizan transferencia de tecnología en la Carretera Iquitos-Nauta, destacan el INIA-AECI en la promoción productiva de pijuayo y arazá. El Proyecto Agroforestal de la UNAP hace transferencia tecnológica en Agroforestería y CARITAS-IQUITOS, con su programa de alivio a la pobreza, promociona el apoyo social integral en salud, educación, producción agroforestal, ganadería menor y piscicultura.
Los artículos del presente libro, conjuntamente con el Mapa Geoecológico de la Zona de Iquitos, Perú (Anexo de este libro), son generados por un equipo multidisciplinario interinstitucional nacional e internacional, y están orientados a suministrar información científica actualizada de diversos aspectos ambientales y de desarrollo en la zona de Iquitos. Esperamos que estos capítulos sean útiles en el proceso de encontrar métodos adecuados, en la búsqueda de alternativas para un desarrollo sostenible en la zona de estudio, asimismo como en el llano Amazóníco en general.
El área de estudio es una parte representa la selva baja amazónica peruana, con sus peculiaridades ambientales naturales restrictivas de actividades productivas convencionales y con potencialidades que demandan una gestión cuidadosa para su racional utilización,
Es también evidente que la intervención humana que ejerce presión sobre los recursos naturales, deriva en resultados funestos que deterioran el potencial real de los ecosistemas y afectan la calidad de vida de los pobladores rurales. Ésta situación es atribuible al desconocimiento real del medio ambiente amazónico, y sustenta la demanda de intensificar investigaciones científicas que orienten un verdadero ordenamiento territorial por vocación, para su y sostenida utilización.
Finalmente, la sensibilización política así como la concientización de la comunidad científica local, regional, nacional e internacional y la participación de instituciones locales en las tareas de desarrollo de las comunidades pobres en los ambientes tropicales, se manifiesta en su contribución al conocimiento del medio ambiente, a través del emprendimiento de varios estudios y de la transferencia de tecnologías productivas viables.